Y llaman al cuadrilátero al boxeador, un boxeador llamado corazón, sube y lucha, un par de ganchos de izquierda y los da al aire, entreno en la arena para tener un buen juego de piernas... el boxeador aturdido no se levanta del golpe a la sien.
Las risas clandestinas de contrabando no llegan y escucha su nombre, se levanta y sigue luchando, no puede haber mas lucha que un corazón enamorado, enamorado de si y enamorado de ella, la lucha sigue y es infinita, el amor y el dolor peleando a muerte nadie sabe quien ganara, las apuestas siguen y la melodía de la voz del amor del corazón lo alienta y lucha, sigue sin parar, la sangre cae al cuadrilítero, la sangre del amor y el dolor se mezcla haciendo una bomba, bomba de amor sin explicación, sin dolor no hay blues y sin amor no existe el querer amanecer para estar en sus brazos, esos brazos que aplauden después de una pelea.
El pelea por su amor y el dolor pelea para que no lo sienta, la solida pelea sigue y seguirá, luchara y reirá, mañana sera un nuevo día y espera no llorar mas...
Espera que después del primer Round ella le diga que lo ama y el poder luchar... el Justorufino Errante lucha con su pasado y el pasado de ella... el seguirá luchando para hacerla feliz y enseñar que ahí estará siempre y para siempre un que esa palabra sea muy corta para decirle que siempre estará...
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